Una matrioska formada en Barcelona

Svetlana Kuznetsova (San Petersburgo, 1985) nació en el seno de una familia de deportistas. Su padre, Alexandr Kuznetsov, es entrenador de ciclistas profesionales -ha entrenado a seis campeones olímpicos- y actualmente pertenece a la disciplina del Lokomotiv, el mejor club ciclista de Rusia. Su madre, Galina Tsareva, fue ciclista profesional, seis veces campeón del mundo e la disciplina de sprint y con más de veinte récords en su haber. Su hermano, Nikolai Kuznetsov, también se decantó por el ciclismo y logró la medalla de plata en Atlanta'96 en la disciplina de persecución por equipos.

A pesar de su influencia sobre dos ruedas -probó suerte en el mundo del ciclismo pero lo dejó por aburrimiento-, 'Sveta', como la llaman cariñosamente familiares y amigos, tuvo claro desde el primer momento que sentía una atracción especial por el mundo del tenis, y a los siete años comenzó a dar sus primeros raquetazos. A los 14 años llegó a Barcelona bajo la tutela de su madre para entrenar en la Academia Sánchez-Casal bajo la dirección de Emilio Sánchez Vicario y Sergio Casal. A los dos años, Kuznetsova aparecía en las listas como número 1 junior.

El salto al profesionalismo lo dio en el año 2000, arropada por los técnicos de la Academia, que la fueron enseñando disciplina, estrategia y a fijar las bases de un juego que fascina hoy en día. Desde el principio, 'Sveta' adquirió el caracter luchador y ganador del tenista español, complementado con un poderoso físico y una enorme capacidad de sufrimiento. Ha sabido madurar, y a los 23 años, es ya toda una veterana en el circuito femenino.

Al finalizar la pasada temporada, Kuznetsova hizo las maletas, dejó atrás su época en Barcelona y volvió a su Rusia natal, donde entrena a las órdenes de Larisa Savchenko.

A pesar de su juventud, Kuznetsova tiene un currículo envidiable, en el que se advierten 11 títulos individuales (donde destacan el US Open del 2004 y el Roland Garros que acaba de ganar) y 13 más en la disciplina de dobles (ganó el Open de Australia en 2005 y ha sido finalista en una ocasión en los otros tres 'grandes'). Su mejor ranking hasta la fecha, fue el segundo puesto del escalafón mundial alcanzado el 10 de septiembre de 2007. Su regularidad le ha permitido no bajarse del carro del 'Top-Ten' en mucho tiempo, pero le faltan más victorias como la de París para iniciar el asalto al número 1. Calidad, compromiso y tenis no le falta...